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Utópica i gran discusión elementos mantenían
En cuerpo encarnados
Cinco seres animados entre ellos discutían
Lagarto de piedra junto al rey de los alados
Nereida fluida contigua al ígneo reptil.
Éter interrumpió este comportamiento infantil

Estaban en el Nolugar todos juntos
Intentando repartir
Todas partes de los mundos
Para tenerlo que adherir
Junto a los otros
Los otros 4 quillotros

El alado reclamaba para el sólo los cielos
Discutiéndole el lagarto
Haciendo gala de celos
Volador le contestó de su envidia harto:
-No quieras, lagarto vivir en el cielo,
Para luego caerte hacia el suelo

El saurio al responder soltó estas palabras:
-Para no caer al suelo, voy a morarlo.
Sin ningún opositor que la boca abra
Nadie replicó y tuvieron que entregarlo.
El lagarto ganaba algo árido y dependiente
Necesitaba del agua, para vivir íntegramente

La Nereida inteligente con la bombilla encendida
Supo ser paciente y reclamó lo más preciado
Ayudando altruistamente, con su idea elegida
al lagarto precipitado
En esto que no quedaba más cosas que repartir
Y varios reunidos sin derecho a elegir

La serpiente de fuego unió el trato
Dejando entre todos un espacio y expandiendo el núcleo
Haciendo un gran agujero en el centro
Pudiendo habitarlo, y marginando al Étereo.
Pero este el más tranquilo no estaba acongojado
Dejándolo así pudiendo escoger el lugar más preciado

El todo, como única petición
El paciente inteligente
Escogió sin compasión
Excluyéndose únicamente
El bien más preciado lo más importante
La espera expectante


Y así fue cómo todo se hizo al demostrarse inteligencia
El universo se creó, dando origen a nuestra vivienda
Más sino es la paciencia
Todo lo que sirvió.